viernes, 15 de agosto de 2008

Populismo de colores

Zona de Tolerancia

Por Rodrigo Vidal

Los que han invertido tiempo, dinero y palabras, criticando el “populismo”, son los que ahora lo utilizan para asegurarse las simpatías del populacho. El problema es que, preocupados más por los votos, dejan de lado la búsqueda de soluciones efectivas. Dos botones del populismo institucional les daré como ejemplo.

La reciente propuesta de instaurar la cadena perpetua contra secuestradores tuvo amplia aceptación por las fuerzas políticas en la Cámara de Diputados federal, y arrasó la votación del Congreso de Veracruz, que se convirtió en el primer estado del país que aprobó la medida, ¿por qué creen? Porque también es alto el número de personas que, con justa razón, exige mayor castigo a los delincuentes.

Pero los que saben del tema –y no es insinuación de que los diputados no sepan del tema, es cuasi afirmación-, dicen que se trata de una medida que no solucionará el problema de la delincuencia en México, y mucho menos detendrá a la “industria del secuestro”, que por cierto, ya somos el primer país del mundo con mayor número de secuestros, es decir, medalla de oro para México.

Entonces, ¿por qué la euforia por aumentar las penas a los delincuentes que llegan a ser detenidos?, pues porque eso les genera simpatía a los políticos. Vienen elecciones y hay que caer bien, haciendo “lo que el pueblo mande”.

El “pueblo” demanda mayor seguridad. En estos momentos todos nos sentimos inseguros, transgredidos en nuestras libertades; violan, secuestran, matan, asaltan, golpean, torturan, y no detienen a nadie. La autoridad ya está rebasada, es más, se volvió cómplice, y en algunos casos hasta el criminal mismo. Eso mantiene un ambiente de venganza, hay en tensión en la sociedad, por lo que no es raro escuchar conversaciones donde algunos no sólo piden cadena perpetua, sino pena de muerte a los delincuentes.

Pero si la lógica no me falla, para castigarlos primero hay que detenerlos, y es ahí donde la puerca torció el rabo. Ya vamos más lejos aún, no basta con detenerlos y castigarlos severamente, sino hay que disminuir los índices de delincuencia y criminalidad.

Otro ejemplo del populismo. En la Suprema Corte de Justicia de la Nación entró el debate por la inconstitucionalidad de la Ley que despenalizó el aborto en el Distrito Federal. Y llegó hasta ahí desde mayo, a propuesta del procurador general de la República, Eduardo Medina Mora, y el titula de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, José Luis Soberanes (el mismo que respaldó el diagnóstico del presidente Calderón de que Ernestina Atenco, indígena de Zongolica, murió por gastritis y no por una violación cometida por militares).

El debate en la SCJN comenzó este viernes. Pero ¿por qué la preocupación del Abogado de la Nación por la Ley que aprobó la Asamblea Legislativa del Distrito Federal?, sencillamente porque también hay un sector muy conservador y numeroso, que no precisamente se concentra en la capital de la República, sino en otros estados, que se opuso y criticó la medida.

¿Entonces obedece a hacerle caso a una mayoría, sin tomar en cuenta a las mujeres, que por alguna razón deciden interrumpir su embarazo? Pues si, se trata de decidir por las mujeres. En ambos casos, se trata de quedar bien con aquellos que te pueden generar votos a favor en una contienda electoral, y no olvidemos que en 2009 se renueva el Congreso de la Unión.

El picadero
- Esta semana que concluye inició con la campaña permanente contra el Sida en Poza Rica en un escenario ya muy visto: autoridades municipales y de salud en sendos discursos, reunidos con grupos de personas que igual ni sabían a qué fueron, posando para la foto con los grupos que si han trabajado con los enfermos de VIH/Sida, pero hasta ahora nadie ha dicho “esta boca es mía”, y reconoce que hace falta educación sexual, pero sin tapujos y llamando al pene pene y a la vagina vagina. No olvidemos que son las relaciones sexuales las principales vías de transmisión del virus.


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