lunes, 29 de diciembre de 2008

Propósitos 2009

Zona de Tolerancia

Por Rodrigo Vidal

Pues queriendo y no, llegamos a la última columna del año, la número 43 desde que retomé la Zona (28 de julio). Fueron 42 textos en donde compartí mi punto de vista sobre diversos temas, aún vigentes, para aspirar al desarrollo y la construcción de una sociedad más igualitaria, más equilibrada, y sin que suene a utopía, sí, para que alcancemos a ser una sociedad más justa.

La explotación infantil, el tema de la interrupción del embarazo, es decir el derecho de la mujer a decidir sobre su cuerpo; la violencia hacia las mujeres, el respeto a los niños y ancianos (o como les dicen en el argot de lo “políticamente correcto”, los adultos mayores), la pandemia del VIH/Sida, desde sus muchos puntos de vista: la prevención, el acceso universal a los medicamentos, la discriminación, los avances científicos, entre otros.

El derecho a la educación sexual, el derecho de los discapacitados –aquí fuimos testigos de los logros obtenidos de la delegación de discapacitados de México durante los Juegos Paraolímpicos de Beijín-, hablamos de la cultura, y el derecho que todos tenemos a hacerla y respetar la de los demás, aunque no nos guste o no entendamos; los avances en materia de derechos lésbico, gay, bisexual, travesti y transgénero (LGBTT), y también los retrocesos y estancamientos.

Hablamos de la crisis, de los movimientos sociales, del populismo y sus usos –criticado por todos y todos recurren a ello-, del aumento a las penalidades y la pena de muerte, en fin, de esto y más fueron los temas que se expusieron en Zona de Tolerancia este año que concluye. Quizá varios de ellos se repitan para 2009, y no porque no tenga más que escribir, al contrario, desearía no saber que existen niños maltratados, violados y asesinados –como el caso de la niña Esmeralda-, que existen mujeres vejadas, violentadas física, moral y psicológicamente; no saber que existen ancianos explotados o en el abandono.

Sería bueno un día salir a la calle y observar policías amables y agentes de Tránsito llenos de cortesía, alejados de la corrupción; encontrarme con taxistas y conductores de autobuses dispuestos a brindar un buen servicio, concientes que su trabajo depende de una concesión pública del transporte.

Ver erradicado el vedetismo político, la mentira, la tranza, el abuso, en las autoridades de todos los niveles. Ser testigo que la gente respeta a los demás por el hecho mismo de ser personas, aunque sean altos, gordos, chaparros, sin una pierna, invidentes, homosexuales, morenos, con VIH/Sida, ancianos, mujeres, que profesen cualquier religión o no la tengan; aunque les guste el regetón o la música clásica, que pertenezcan a cualquiera de las “tribus urbanas” clasificadas al momento.

Si la sociedad fuera así, entonces Zona de Tolerancia sería más un espacio para promover la creación científica y cultural de la sociedad. O quizá me dedicaría a escribir cuentos y una novela seriada. ¡Qué lamentable que no sea así!

Por eso la invitación, aprovechando las tradiciones de fin de año, es a reflexionar sobre lo que nos hace mejor como seres humanos. No a hacer una lista de propósitos para el año nuevo, pues los propósitos suenan a “intento”, y la vida no puede llenarse de intentos, sino de acciones. Recuerden que el “hubiera” es tiempo pendejativo del verbo.

Hagamos más tolerante nuestra convivencia con los demás. Nada nos quita con ser amables, respetuosos. Si he de rescatar una enseñanza del año que termina, creo que la resumo en esta frase: “nada es para siempre”, porque las cosas y las personas que tenemos hoy, mañana ya no estarán, por lo tanto disfrutemos de la vida concientes que sólo es una y dura poco.

El sábado por la noche cenaba con el papá de un amigo mío, y me decía que siempre al llegar a viejos, se logra entender el sentido de la vida, que nosotros mismos nos la complicamos, y que el secreto para disfrutarla es: mantenerse humilde.

Mis mejores deseos para todos los lectores de Zona de Tolerancia y Diario de Poza Rica. Mi gratitud por seguirnos durante 2008 y pongo mi esperanza en que así será todo 2009. Que dentro de la adversidad, tengamos la capacidad de afrontar los retos del próximo año: económicos, políticos, sociales, personales. A todos, feliz y exitoso año 2009.

Para deseos y comentarios de fin de año, escribir aquí:

2 comentarios:

PashmiNa dijo...

Hola Rui!

Primero q nada te agradezco el cumplido que dejaste en mi blog xD

Tocaste varios temas bastante interesantes a lo largo del año (o desde que te leo) y seguiré tus columnas lo que viene el próximo año; es muy interesante salir a la calle y hacer etnografía porque muchas veces no vemos cosas que ahí están porque no les damos importancia..

Te agradezco tus columnas, he aprendido muchísimo gracias a ti y te repito que seguiré leyéndote hasta que dejes de escribir, te deseo feliz año y gracias tmb x seguirme!

Un abrazo!!

Zërmend dijo...

Hola mi querido Ruy.

Claro que seguiremos leyendo Tolerance hasta que nos cansemos de respirar...

Todos los temas fueron de harta utilidad y no es utopía, es poner el granito de arena que nos toca a los que deseamos ser ciudadanos responsables y éticos...

Saludos y un buen fin de año y excelente inicio del otro.

Abrazos!!!!

A mi me gusta la Zona